Bienvenidos a la Sala de Ramón Martí Llorent
Exploren nuestra colección de máscaras y espejos antiguos, que datan del siglo XIX y principios del XX, un periodo lleno de festividades religiosas en México. Admire la lucha libre potosina con sus legendarias máscaras y descubra las coloridas máscaras de carnaval, utilizadas en danzas tradicionales como la danza de los chínelos y la danza de los cuchillos.
No se pierdan el Salón del Candil, que alberga un antiguo candil de bronce. También podrán apreciar una destacada colección de máscaras internacionales, que reflejan diversas culturas y narrativas de Europa y más allá.
¡Acompáñenos en este viaje a través de la rica herencia cultural de las máscaras!
Tiene lugar en nuestra sala abierta de la planta alta, sala 2.



Sala de los espejos y mascaras antiguas
Encontrarás variedad de máscaras antiguas, donadas por el Ing. Víctor José Moya Rubio y el Dr. Jaime Cortina Watson, las piezas datan del siglo XIX y principios del XX cuando la vida en México transcurría al compás de un suntuoso calendario de fiestas que entrañaban un sentido religioso.
San Luis potosí máscaras e indumentaria
Se muestra la exposición de lucha libre potosina, donde encontraras variedad de máscaras de personajes que son una leyenda dentro de este tema.




Máscaras de carnaval
Encontrarás diversas máscaras de carnavales, que se utilizaban en danzas tradicionales como danza de los chínelos, danza de los cuchillos, danza de la culebra, entre otros.
Salón del candil usos múltiples
Salón del candil, corresponde al antiguo comedor de lo que fuera la residencia de Martí, cuenta con un candil antiguo de bronce con prismas de cristal cortado, mismo que le otorga el nombre.





Máscaras Internacionales
La conformación de la importante colección de máscaras de otros países que se exhibe en esta Sala ha sido posible gracias a diversas donaciones realizadas al Museo a través de particulares, consulados y embajadas. Las máscaras están agrupadas a partir de su continente de origen, encontramos máscaras de Europa que nos remiten a los cuentos escandinavos o al italiano Pinocchio hasta llegar al desesperado Grito de Munch y la angustia del pueblo euskera con la Guernica.